Innovadora fachada modular para un complejo residencial en Barcelona
La División Residencial de GARCIA FAURA ha formado parte del equipo desarrollador de un prototipo de fachada modular innovadora y multifuncional que se ha instalado en un complejo de 30 viviendas sociales en Sant Quirze del Vallès (Barcelona). La actuación forma parte de un proyecto liderado por la Agencia de la Vivienda de Cataluña y diseñado por el estudio de arquitectura Pich-Aguilera dentro del proyecto europeo Plug-n-Harvest.
La acción parte de los trabajos de rehabilitación energética de un edificio de viviendas en forma de U construido en 2003 y que sufría problemas de humedades, de confort térmico y de rotura de piezas de acabado en las tres fachadas ventiladas que dan a la calle, por lo que se decidió emprender obras de mejora.
La promoción es propiedad de Incasòl y es gestionada por la Agencia de la Vivienda de Catalunya (AVC), entidad socia del proyecto europeo Plug-n-Harvest, quien promueve que las administraciones públicas sean ejemplo de transformación social y ambiental e implementen proyectos orientados al desarrollo sostenible.
Ante este reto, el estudio de arquitectura Pich-Aguilera redactó un proyecto de renovación en colaboración con la AVC a partir de una solución constructiva y tecnológica de fachada dinámica innovadora. La División Residencial ha sido la responsable del desarrollo del prototipo, su testeo en un laboratorio de ensayos y, una vez validada la solución, su diseño de producción, la fabricación de módulos y la ejecución de los trabajos de renovación de fachada e instalación. El proyecto ha sido parcialmente subvencionado con los fondos europeos Horizon 2020.
Un ejemplo para otros proyectos
Con el proyecto de la AVC y Pich-Aguilera, la División Residencial ha desarrollado un diseño que no sólo resuelve las patologías de la fachada del edificio, sino que también permitirá reducir el elevado consumo energético y, al mismo tiempo, reducir la factura eléctrica de las viviendas de alquiler social.
Y es que el diseño del nuevo sistema de fachada (que será extrapolable a otros proyectos de rehabilitación) integra una serie de medidas para la reducción de la demanda energética y el incremento del uso y la producción de energías renovables, hasta en el punto de permitir distribuir la energía sobrante.